La respiración como un superpoder, capaz de influir en casi todos los aspectos de tu cuerpo y tu mente. La respiración es una de las formas más eficaces de controlar el estrés porque aprovecha tu propia fisiología y no requiere herramientas especiales. En tan solo 90 segundos, la respiración profunda puede estimular una “respuesta de relajación” fisiológica que atenúa la respuesta de “lucha o huida” de tu cuerpo, inhibiendo la producción de hormonas del estrés, reduciendo la presión arterial y disminuyendo el ritmo cardíaco.
En resumen, la forma de respirar es importante; la calidad de tu patrón de respiración afecta tu capacidad para mitigar el estrés. De hecho, un patrón respiratorio disfuncional y por la boca puede impulsar tu respuesta al estrés, incluso cuando estás tratando de utilizar tu respiración para calmarte.
De seguro te estarás preguntando, ¿Cómo puedo hacerlo y aprovecharme de los beneficios? Aquí tienes algunos métodos respaldados por la ciencia:
🧘♂️ 1. Respiración diafragmática (o abdominal)
✅ Cómo hacerla:
Siéntate o acuéstate en una posición cómoda.
Coloca una mano sobre tu pecho y otra sobre tu abdomen.
Inhala por la nariz profundamente, sintiendo cómo tu abdomen se expande (sin mover el pecho).
Exhala lentamente por la nariz o boca, sintiendo cómo el abdomen baja.
Repite durante 5-10 minutos.
🔎 Beneficio: Activa el sistema nervioso parasimpático, promoviendo la relajación y reduciendo la frecuencia cardíaca.
🌬️ 2. Respiración 4-7-8
✅ Cómo hacerla:
Inhala por la nariz contando hasta 4.
Retén la respiración contando hasta 7.
Exhala lentamente por la nariz contando hasta 8.
Repite de 4 a 6 veces.
🔎 Beneficio: Reduce la ansiedad y mejora la oxigenación del cerebro.
🌀 3. Respiración alternada (Nadi Shodhana)
✅ Cómo hacerla:
Usa el pulgar derecho para cerrar tu fosa nasal derecha.
Inhala profundamente por la fosa nasal izquierda.
Cierra la fosa nasal izquierda con el dedo anular y exhala por la derecha.
Inhala por la derecha y repite el ciclo.
🔎 Beneficio: Equilibra los hemisferios cerebrales y promueve la calma mental.
🏆 4. Respiración prolongada (exhalación más larga que la inhalación)
✅ Cómo hacerla:
Inhala por la nariz contando hasta 4.
Exhala por la nariz contando hasta 6 u 8.
Repite varias veces hasta sentirte más relajado.
🔎 Beneficio: Disminuye la respuesta al estrés y ayuda a regular el ritmo cardíaco.
🚀 Consejo extra:
Práctica estas técnicas por 5-10 minutos al día o en momentos de estrés. Con el tiempo, notarás mejoras en tu bienestar y concentración.
En caso de presentar dificultades para respirar por la nariz, ya sea por alergias, resfriados, tabique desviado o cualquier otra patología, te recomendamos probar nuestras tiras nasales, las cuales te ayudaran a dilatar tus orificios nasales permitiéndole un mayor flujo de oxígeno y comodidad a la hora de realizar estos ejercicios.